Prometí no tirarme noches enteras soñando contigo. No recordarte nunca más. No llorar por no tenerte. No sufrir por verte con otra. No venirme abajo cuando escuchara tu nombre. Prometí no volver a pensar en ti. Pero es imposible, no he conseguido dejar de soñar contigo desde que te conocí. En cada momento estoy recordando nuestra conversación por muy corta que fuera. Lloro cada día en tu nombre. Siento que me muero cuando pienso que le estas regalando tu boca a cualquier niña tonta. Me muero cada vez que te escucho hablar. No he dejado ni un solo momento de pensar en ti...

Por que te quiero.