Cuesta y mucho

Que me cuesta seguir adelante, pues sí. Porque yo aun no te he olvidado, esos bonitos momentos que vivimos juntos siguen estando en mi mente y también en mi corazón. Porque esos recuerdos no me dejan ni un momento sola, siempre estan ahi, recordandome lo feliz que fui a tu lado. Sé que ha pasado mucho tiempo, pero no puedo evitar seguir sientiendo esto tan fuerte que siento por ti. Me duele y mucho tener que verte todos los días y darte dos besos para saludarte cuando en realidad solo quiero darte uno, suave y lento, igual que antes. Nadie puede reemplazarte, no hay otro chico tan perfecto como tú. No encuentro otro que tenga defectos que me atraigan porque solo los tuyos eran capaces de hacer eso. Y al final no sé si es que no puedo seguir adelante o que yo no quiero seguir adelante

Ser felices

Nacimos para vivir, disfrutar y ser felices. No para ser perfectos

Ahora tú

Dicen que se sabe si un amor es verdadero
cuando duele tanto como dientes en el alma.
Dicen que lo nuestro es tan solo pasajero
pero que sabe la gente lo que siento, cuando callan.

Ahora tú, llegaste a mi, amor.

Y sin más cuentos apuntas directo en medio del alma.

Ahora tú, llegaste a mi.

Sin previo aviso, sin un permiso, como si nada.

AHORA TÚ

Amor

¿Conoces ese sentimiento? Ese que no te deja ver las cosas como son. Que nos hace caer hasta el más profundo hoyo. Por el que somos capaces de vivir de ilusiones, de sueños o incluso de recuerdos. Ese que nos puede hacer caminar o correr muy lejos del resto el universo. Pues no es tan bueno y bonito como lo pintan en las peliculas romanticas, porque cuanto más corres menos ves hasta que terminas chocando con un gran muro al que las personas llaman realidad.

Sueños y realidad

En este mundo hay dos cosas que sobresalen por encima de todo. Los hermosos que pueden llegar a ser los sueños y lo amarga que es la cruda realidad.

El dinero...

No entiendo como la gente de hoy en día tiene el valor de criticar las opiniones de los demás sin conocer el verdadero pensamiento que esta detras de esas palabras.
Sí, soy una chica materialista, no lo puedo evitar, valoro demasiado el dinero. En mi vida el dinero es una de las cosas que más importan, por no decir que es la que más importa, y no soy rica. Simplemente no entiendo como la gente puede decir que el dinero no es importante, que no da la felicidad. Eso lo dicen porque lo tienen, aunque no tienen mucho pero tienen suficiente para vivir no como la gente que tiene que vivir en la calle y pedir dinero a desconocidos. Ninguna de esas personas te diran que el dinero no es importante, que hay que valorar más otras cosas.
Y todo esto lo digo porque se me parte el corazón en mil pedazos cuando veo a personas pidiendo dinero a la gente. En esos momentos el unico sentimiento que me imbade es la pena. Saber que yo pido cada día una cosa nueva y a la semana me lo dan y que esas personas no tengan ni la mitad de lo que tengo yo me provoca dolor. Por eso soy materialista, porque lo material, le gusta a la gente o no, es demasiado importante. Y por eso tengo tantas ansias de tener cada día más cosas, más dinero, no para mi, yo no lo quiero todo para mi sino para darle un poco de lo mucho que me sobra a las personas que ni se imaginan lo mucho que puede llegar a tener una persona normal en su vida.

#202

He aprendido a presenciar como será el dolor del adios con tan solo un suave y largo beso.

sueños

Pasan horas y horas y yo aun sigo pensando en ese sueño tan bonito que soñe, en el que tu y yo volviamos a ser felices sin que nos importara lo que comentaban. Pero como dice mi madre los sueños, sueños son.

Lo echo todo de menos

Echo de menos pasar todos los días de verano en la playa. Echo de menos brincar en los charcos y ensuciarme toda. Echo de menos cantar en los escenarios y bailar bajo la lluvia. Echo de menos que consedan todos mis caprichos. Echo de menos aullentar a las gaviotas. Echo de menos jugar al pilla pilla y correr hasta que no pudiese respirar. Echo de menos jugar con mis muñecas. Echo de menos dormir horas y horas sin preocuparme que tengo que estudiar. Echo de menos llorar cuando no conseguia coger golosinas en las piñatas. Echo de menos llevarme bien con todos y no saber que era un enemigo. Pero, sobre todo, lo que más echo de menos de mi infancia es no saber lo que es sufrir por los amores imposibles.

Sin ellas..

Ya no tengo fuerzas para olvidarte. Lo único que quiero es tenerte cerca y que me abraces cuando más me hagas falta.